El Conservatorio Nacional de Música de Chile tiene una página con un diseño estupendo, como se pudo ver en su día.
Pero al parecer se les ocurrió que el diseñador haría el trabajo gratuitamente porque al finalizar la web, se negaron a pagarle por su servicio. Ante lo ocurrido el diseñador defendiendo sus derechos ya que no le pagaron, deshabilitó la web y colgó un letrero dando a conocer el porqué del estado actual de la web. Si la web en cuestión fuese de una tienda de barrio nada conocida, no hubiera tenido ninguna repercusión, pero tratandose de una entidad a nivel nacional, si que puede llegar a oídos de muchas personas.
Por eso un consejo mío es siempre cobrar la totalidad o parcialidad de un trabajo por adelantado, o desglosar el desarrollo de la web e ir cobrando por metas cumplidas. Aunque claro está que si tenemos el control del dominio y alojamiento… mejor que mejor.
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